Apologetica-Teologia-Ciencias Biblicas

Filipenses 1:27 Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo, para que o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes por la fe del evangelio,

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sábado, 23 de mayo de 2009

Las Herejías II: Sectas I

El Triunfo de la Iglesia por Pedro Pablo Rubens

Sectas cristianas a través de la Historia

Siglo I (1-100)

Simonianismo
Simón el Mago, llamado también Siimón de Gitta fue un líder religioso samaritano, inicialmente gnóstico (posteriormente modificó sus doctrinas), mencionado en la literatura cristiana primitiva.

Puntos de vista conflictivos
Se encuentran referencias a Simón el Mago en los Hechos de los Apóstoles (Hechos 8:9-24), en las obras patrísticas de Justino Mártir, Ireneo de Lyon e Hipólito, en los Hechos apócrifos de Pedro y en la llamada "literatura clementina". No está claro si todas estas fuentes se refieren a un solo personaje o a varios personajes distintos. Las distintas fuentes de referencia sobre Simón presentan imágenes muy diferentes de su figura, hasta el punto de que existen discusiones sobre si se refieren a la misma persona. Asumiendo que todas las referencias se refieren al mismo personaje del que hablaron los padres de la Iglesia, la referencia más antigua y conocida se encuentra en el capítulo 8 de Hechos de los Apóstoles. En él se relata que Simón, un mago de Samaria, era seguidor del diacono Felipe. Simón el Mago practicaba la magia en la ciudad de Sebaste en Samaria, que fue convertido al cristianismo por Felipe el Evangelista, pero que después trató de comprar a los Apóstoles Pedro y Juan, que fueron enviados a Samaria, para que le concedieran el poder del Espíritu Santo. Simón les ofreció dinero, a cambio del poder, de transmitir el Espíritu Santo, proposición que ambos apóstoles rechazaron escandalizados. (De esta propuesta de Simón el Mago deriva la palabra "simonía", que designa el pecado consistente en pagar por obtener prebendas o beneficios eclesiásticos).

En el texto cristiano apócrifo de los Hechos de Pedro se narra una de las leyendas más conocidas acerca de Simón el Mago. Cuando exhibía sus poderes mágicos en Roma, volando ante el emperador romano Nerón en el Foro Romano, para probar su condición divina, los apóstoles Pedro y Pablo rogaron a Dios que detuviese su vuelo: Simón paró en seco y cayó a tierra, donde fue apedreado. Cirilo de Jerusalén (346 d. C.) da otra versión de este incidente en el prefacio de su Historia de los maniqueos: Simón el Mago viajaba por el aire en un carro tirado por demonios, cuando Pedro y Pablo oraron, y sus oraciones lograron que cayera al suelo, ya cadáver. Para el simonianismo, antigua secta gnóstica, Simón el Mago era dios en forma humana.

Justino e Ireneo
Justino mártir (en sus Apologías y en una obra perdida contra las herejías, que Ireneo utilizó como su fuente principal para una obra similar) e Ireneo (Adversus Haereses) cuentan el mito de Simón y Elena. De acuerdo con este mito, que era el centro de la religión simonista, al principio de los tiempos Dios tuvo su primer pensamiento llamado Ennoia o Sophia, que era una mujer y de ese pensamiento surgieron los ángeles cuando descendió a las regiones inferiores de la creación. Pero los ángeles se rebelaron contra ella por celos y crearon el mundo y lo convirtieron en su prisión, donde apresaron su cuerpo femenino. Desde entonces ella se reencarnó muchas veces, y en cada ocasión resultó humillada. Entre sus muchas reencarnaciones se encontraba Helena de Troya, y finalmente se reencarnó como Elena, una esclava y prostituta de la ciudad fenicia de Tiro. A su vez descendió bajo la forma de Simón el Mago para rescatar a su Ennoia. Tras redimirla de la esclavitud viajó con ella, proclamándose Dios y a ella como su Ennoia, prometiendo que disolvería el mundo que los ángeles habían creado en su rebelión, pero quienes confiasen en él y en Elena regresarían con ellos a los mundos superiores.

Justino e Ireneo ofrecen otras informaciones: que Simón procedía de la ciudad samaritana de Gitta y que los simonianos adoraban a Simón en la forma de Zeus y a Elena en la forma de Atenea. También dice que el emperador Claudio levantó una estatua a Simón en una isla del río Tíber con la inscripción Simoni Deo Sancto "A Simón, el Dios Santo". Sin embargo, en el siglo XVI, en la citada isla se desenterró una estatua dedicada a Semo Sancus, una deidad de los sabinos, lo que ha llevado a muchos eruditos a pensar que Justino confundió al dios Semoni Sancus con Simón el Mago.

Hipólito
Hipólito, en su Philosophumena, ofrece información más detallada sobre el contenido doctrinal del simonianismo, incluyendo un sistema de emanaciones divinas e interpretaciones del Antiguo Testamento. Algunos creen que Hipólito muestra una versión más elaborada del simonianismo, posterior a su fundador, y que en las doctrinas originales del culto eran mucho más sencillas y próximas al relato de Justino mártir e Ireneo.

Interpretaciones radicales
De acuerdo con Hermann Detering, desechando las referencias y datos de Ireneo y Justino, menciona que Simón el Mago podría haber sido un apodo de Pablo de Tarso, que habría sido rechazado por la Iglesia oficialista y que cambió su nombre tras ser rehabilitado. Aunque a primera vista parece una teoría demasiado radical, en algunas ocasiones Simón es descrito de forma muy semejante a Pablo. Otro elemento que apoya esta teoría es que aunque la ortodoxia cristiana a menudo muestra a Marción como seguidor de Simón el Mago, el propio Marción nunca lo menciona, identificándose a sí mismo como discípulo de Pablo. Además el apócrifo Apocalipsis de Esteban presenta a Pablo en un tono muy negativo, mostrándolo como un villano y enemigo del cristianismo, convirtiéndose únicamente al final de su vida. Sin embargo, el actual canon bíblico registra que el martirio de Esteban se produjo antes de la conversión de Pablo (Hechos 6:8; 7:60).

Gnosticismo
El gnosticismo (gnosis: conocimiento). El término proviene del griego Γνωστηκισμóς (gnostikismós); de Γνώσης (gnosis): ‘conocimiento’, es un movimiento espiritual pre-cristiano fruto del sincretismo de elementos iranios con otros mesopotámicos, de escuelas filosóficas griegas como el platonismo y el pitagorismo, y de la tradición apocalíptica judía. Estalla públicamente a mediados del siglo II como una tendencia poderosa e identificable con numerosos maestros, diversidad de escuelas y amplia expansión.

Anticristianismo
El gnosticismo es un conjunto de corrientes sincréticas filosófico-religiosas que llegaron a mimetizarse con el cristianismo en los tres primeros siglos de nuestra era, convirtiéndose finalmente en un pensamiento declarado herético después de una etapa de cierto prestigio entre los intelectuales cristianos. Es preciso resaltar que las creencias gnósticas son fuertemente anticristianas y niegan la encarnación del Verbo, la muerte y resurrección de Jesús, además de tener una pesimista visión del mundo. Es gracias al testimonio de muchos escritos cristianos contra los gnósticos que conocemos muchas de sus creencias. Los dogmas proclamados por el cristianismo primitivo se fijaron para salvar la fe original de la contaminación de ideas gnósticas que comenzaron a proliferar en el mundo helenístico y dentro del imperio romano entre los siglos II al V d. C. Estas sectas y creencias gnósticas son los autores de los llamados “evangelios gnósticos” con los que algunos se ilusionan en encontrar algo más original que lo que sabemos de Jesús, pero para su decepción estos textos no son cristianos, y son muy posteriores a los cuatro que la Iglesia aceptó como auténticos. Eso sí, muchos gnósticos –al igual que algunas sectas de hoy- se autoproclamaban los “verdaderos cristianos”, de ahí la confusión de muchos ante el estratégico uso de la terminología cristiana con contenidos y sentidos ajenos a la revelación bíblica. Los llamados “Evangelios Gnósticos” encontrados en Nag Hammadi y el de Judas son producto de estas sectas, que son posteriores a la época apostólica y no tienen un origen verdaderamente cristiano, de ahí que no se los reconozca como auténticos evangelios. Sin embargo son un importante hallazgo para conocer el gnosticismo de esa época.

El Manuscrito gnóstico de Judas
En el evangelio gnóstico de Judas, Jesús le dice que será el encargado de liberarlo de su cuerpo, con un claro desprecio del mismo y marcando la identidad de Jesús como un ser puramente espiritual, revestido provisoriamente de materia. Judas no habría sido el traidor que vendió a Jesús por 30 monedas de plata, sino el discípulo privilegiado al que encarga la misión más difícil, sacrificarlo, para ayudar a su esencia divina a escapar de la prisión del cuerpo y elevarse al espacio celestial (cosmovisión gnóstica). “Tú serás el apóstol maldito por todos los demás. Tú, Judas, ofrecerás el sacrificio de este cuerpo de hombre del que estoy revestido”.

Tipos de Gnosticismo
En efecto, puede hablarse de un gnosticismo pagano y de un gnosticismo cristiano, aunque el más significativo pensamiento gnóstico se alcanzó como rama heterodoxa del cristianismo primitivo. Según esta doctrina los iniciados no se salvan por la fe en el perdón gracias al sacrificio de Cristo, sino que se salvan mediante la gnosis, o conocimiento introspectivo de lo divino, que es un conocimiento superior a la fe. Ni la sola fe ni la muerte de Cristo bastan para salvarse. El ser humano es autónomo para salvarse a sí mismo. También es una creencia dualista: el bien frente al mal, el espíritu frente a la materia, el ser supremo frente al Demiurgo, el espíritu frente al cuerpo y el alma.

El gnosticismo cristiano, pagano en sus raíces, llegaba a presentarse como representante de su tradición más pura. El texto gnóstico de Eugnosto el Beato parece ser anterior al nacimiento de Jesús de Nazaret. La enorme diversidad de doctrinas y "escuelas gnósticas", hace difícil hablar de un solo gnosticismo. Tampoco es cierto que el gnosticismo fuera un cristianismo marginal, sino que existía una mutua desacreditación como dos religiones enemigas. No solo los cristianos rechazaban a los gnósticos por tergiversar el mensaje y la vida de Jesús con doctrinas orientales y filosofías extrañas, sino que los gnósticos también rechazaban y atacaban a los cristianos por considerarlos seres inferiores espiritualmente. El ataque era mutuo, solo que el gnosticismo por su naturaleza sincretista de mezclar elementos de cualquier religión, asimilaba lo cristiano a su manera y da impresión de tolerante. Pablo luchó esforzadamente contra el gnosticismo pues advirtió que podía devorar al cristianismo y destruirlo. En Corinto conoció a cristianos cultos que había reducido a Jesús a un mito. Entre los colosenses halló a cristianos que adoraban a espíritus y ángeles intermedios. Era difícil combatir al gnosticismo porque, a semejanza de la hidra, tenía muchas cabezas y siempre estaba cambiando.

Aspectos comunes de su pensamiento:
-Su carácter iniciático, por el cual ciertas doctrinas secretas del Cristo o el "ungido" estaban destinadas a ser reveladas a una élite de iniciados. De esta forma, los gnósticos cristianos reclaman constituir testigos especiales de Cristo, con acceso directo al conocimiento de lo divino a través de la gnosis o experimentación introspectiva a través de la cual se podía llegar al conocimiento de las verdades trascendentales. La gnosis era, pues, la forma suprema de conocimiento, solamente al alcance de iniciados.

-El mismo conocimiento de las verdades trascendentes producía la salvación, según las diversas corrientes, la importancia de practicar una vida cristiana podía variar, siendo en cualquier caso algo secundario.
Su carácter dualista, por el cual se hacía una escisión tajante entre la materia y el espíritu. El mal y la perdición estaban ligados a la materia, mientras que lo divino y la salvación pertenecían a lo espiritual. Por esa razón no podía existir salvación alguna en la materia ni en el cuerpo. El ser humano solo podía acceder a la salvación a través de la pequeña chispa de divinidad que era el espíritu. Solo a través de la conciencia del propio espíritu, de su carácter divino y de su acceso introspectivo a las verdades trascendentes sobre su propia naturaleza podía este liberarse y salvarse. Esta experimentación casi empírica de lo divino era la gnosis, una experiencia interna del espíritu. Aquí se puede ver en el platonismo un antecedente claro del gnosticismo, tanto en su dualismo materia-espíritu, como en su forma introspectiva de acceder al conocimiento superior, siendo la gnosis una versión religiosa de la mayéutica de Sócrates. Este dualismo también prefigura el futuro maniqueísmo.

-Su peculiar cristología, siendo la materia el anclaje y origen del mal, no es concebible que Jesucristo pudiera ser un ser divino y asociarse a un cuerpo material a la vez, puesto que la materia es contaminadora. Por esa razón surge la doctrina del Cuerpo aparente de Cristo, según la cual la Divinidad no pudo venir en carne, sino que vino en espíritu mostrando a los hombres un cuerpo aparentemente material (docetismo). Otras corrientes sostienen que Jesucristo fue un hombre vulgar que en la época de su ministerio fue levantado, adoptado por una fuerza divina (adopcionismo). Otras doctrinas afirman que la verdadera misión de Cristo era transmitir a los espíritus humanos el principio del autoconocimiento que permitía que las almas se salvaran por sí mismas al liberarse de la materia. Otras enseñanzas proponían incluso que Jesús no era un ser divino.

-Peculiares enseñanzas sobre la divinidad, entre estas se encontraba la de que todo espíritu era divino, incluyendo la parte espiritual del hombre (el alma), que no necesitaba a nadie para salvarse a sí mismo, siendo Cristo enviado a revelar esa verdad. Por otra parte, el creador/ordenador de la materia (llamado Demiurgo), al multiplicar con su creación la materia, sería un ser malvado y opuesto al verdadero Ser Supremo del cual surgió.

-Conclusiones éticas muy divergentes, siguiendo la idea de la condenación de la materia, algunas corrientes afirmaban que era necesario el castigo y martirización del cuerpo para, a través del padecimiento de la carne, contribuir a la liberación del espíritu, propugnando un modo de vida ascético. Sin embargo, otras corrientes afirmaban que, siendo la salvación dependiente únicamente de la gnosis del alma, el comportamiento del cuerpo era irrelevante, disculpándolo de toda atadura moral y librándolo a toda clase de goces. Otras enseñanzas reprobaban la multiplicación de la materia, siendo así la procreación un acto condenable. También existían corrientes que, al igual que el platonismo y las filosofías orientales, creían en el retorno cíclico de las almas a la prisión de la materia a través de la reencarnación. El iniciado, igualmente, buscaba romper este ciclo a través de la gnosis (a través de la iluminación, en las religiones orientales).

-Interpretación alegórica del cristianismo y de las escrituras, así, se reinterpretan a la luz gnóstica las historias de la creación, etc. dándoles significados filosóficos.

-Establecimiento de jerarquías espirituales, en la cima de los seres existe un Dios, un ser perfecto e inmanente cuya propia perfección hace que no tenga relación alguna con el resto de seres imperfectos. Es inmutable e inaccesible. Descendiendo en una escala de seres emanados de aquél llegamos al Demiurgo, antítesis y culmen de la degeneración progresiva de los seres espirituales, y origen del mal. En su maldad, el Demiurgo crea el mundo, la materia, encadenando la esencia espiritual de los hombres a la prisión de la carne. En este escenario se libra una batalla entre los principios del bien y el mal, la materia (apariencia) y el espíritu (sustancia). Podemos ver paralelismos claros con el zoroastrismo.

-Establecimiento de jerarquías humanas, en la cima de la jerarquía humana estaban los iniciados, en los que es predominante el espíritu. Ellos pueden experimentar la gnosis y acceder así a la salvación. Por debajo está el resto de los cristianos, en los que predomina el alma sensible y que se pueden salvar siguiendo la guía de los primeros. En la parte más baja están aquéllos en que predomina el cuerpo y que, por tanto, no alcanzarán la salvación.

Historia y fuentes
El Gnosticismo es tan viejo como el hombre mismo –teniendo su inicio cuando Satanás puso duda en el corazón de Eva en cuanto a la autoridad final de la Palabra de Dios. Lo vemos demostrado en lo que Satanás le dijo a Eva que recibiría cuando fuera “iluminada” –cuando sus ojos fueron abiertos a la supuesta “verdad”Sino que sabe Dios que el día que comáis de el, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal. (Génesis 3:5). Satanás odia a Dios con una pasión feroz, nacida de los celos y utiliza cada oportunidad para crear dudas de Su fidelidad. Y la razón por la cual la humanidad esta en el caos espiritual en que se encuentra es porque Adán y Eva fueron “iluminados”. Sus ojos fueron abiertos a una nueva esfera y obtuvieron el conocimiento (Gnosis en griego es la raíz de la palabra gnosticismo) del bien y del mal que Dios mismo había evitado que tuvieran, para su propio bien. Y el diablo continua tentando la raza humana con una gnosis oculta que solo pueden tener por su elección.

Algunos cristianos identifican como gnóstico a Simón el Mago, personaje que aparece en una narración en Hechos de los apóstoles en el Nuevo Testamento. Su personalidad más relevante fue Valentín de Alejandría, que llevó a Roma una doctrina gnóstica intelectualizante. En Roma tuvo un papel activo en la vida pública de la Iglesia. Su prestigio era tal que se le tuvo en consideración como posible obispo de Roma. Otros gnósticos de renombre son Pablo de Samosata, autor de una célebre herejía sobre la naturaleza de Cristo. Carpócrates concibió la idea de la libertad moral de los perfectos, en la práctica una ausencia total de reglas morales. Finalmente, el amplio rango de variación moral del gnosticismo fue visto con recelo y el obispo Ireneo de Lyon lo declaró herejía en el 180 d. C., parecer que comparte la Iglesia Católica. En 1945 fue descubierta una biblioteca de manuscritos gnósticos en Nag Hammadi (Egipto), que ha permitido un conocimiento mejor de sus doctrinas, anteriormente solo conocidas a través de citas, refutaciones, apologías y heresiologías realizadas por Padres de la Iglesia.

Cantidad de millones, muchos de ellos verdaderos creyentes, continúan siendo engañados por la falsa religión del Gnosticismo. Porque muy pocos entienden que la búsqueda de “iluminación espiritual” es la base y el modus operandi de los Rosacruces y la Masonería. De acuerdo a la doctrina del Gnosticismo, el conocimiento oculto –la iluminación espiritual deberá ser impartida a los denominados “elegidos” antes de que puedan ascender al “pleroma” y formar parte de su concepto de dios. (Pleroma es una palabra griega cuya connotación básica es “conclusión” y es usada para denotar su versión panteísta del cielo.) Pablo, sin embargo, le clava una estaca al débil corazón de tal doctrina cuando afirma sobre Jesucristo:

Carta a los Colosenses 2:9 “Pero en el habita corporalmente toda la plenitud de la deidad”. 

La palabra traducida como “plenitud” es pleroma, y la declaración que hace Pablo inspirado por Dios, establece públicamente que Jesucristo es el pleroma – ¡la total y completa representación corporal de la divinidad! ¡Amen! Y el principio gnóstico del “elegido” esta puesto como una imitación del concepto de los elegidos de Dios, como los vemos mencionar en los siguientes pasajes bíblicos:

Isaías 42:1 He aquí mi siervo, yo le sostendré; MI ESCOGIDO, en quien mi alma tiene contentamiento; he puesto sobre el mi Espíritu; el traerá justicia a las naciones.

Mateo 24:24 Porque se levantarán falsos cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los ESCOGIDOS.

Romanos 8:33 ¿Quién acusará a los ESCOGIDOS de Dios? Dios es el que justifica.

Colosenses 3:12 Vestíos, pues, como ESCOGIDOS de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia.

1 Timoteo 5:21 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, y de sus ángeles ESCOGIDOS, que guardes estas cosas sin prejuicios, no haciendo nada con parcialidad.
Tito 1:1 Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesucristo, conforme a la fe de los ESCOGIDOS de Dios y el conocimiento de la verdad que es según la piedad.

1 Pedro 1:2 ELEGIDOS según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.

2 Juan 1:1 El anciano a la señora ELEGIDA y a sus hijos, a quienes yo amo en la verdad; y no solo yo, sino también todos los que han conocido la verdad.

El Gnosticismo es una sutil falsificación –de hecho, es tan sutil que algunos de los elegidos de Dios siguen siendo engañados por sus enseñanzas. Mateo 24:24 y Marcos 13:22, señalan lo que dijo el Señor acerca de tal engaño, el engaño es una posibilidad distinta para los cristianos. El Gnosticismo ha plagado la Iglesia desde su inserción y en el día de hoy, el grado de engaño se esta intensificando a una velocidad exponencial. También le suena bien al hombre natural –el hombre que no ha sido regenerado, pero a su conveniencia se olvida de que la Biblia dice que Satanás tiene muchos hijos. Las únicas personas que pueden reclamar legítimamente que Dios es su Padre celestial, han nacido en su familia a través del nuevo nacimiento en Cristo Jesús. Pero los miembros de las diferentes y numerosas religiones se llaman unos a otros como “hermanos”, algo que la Biblia expresamente prohíbe.

“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿Qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y que comunión la luz con las tinieblas?” 2 Corintios 6:14.

Un requisito de membresía es que ellos crean en “dios”. Pero la pregunta es ¿en cual dios?, Intencionalmente el promedio de miembros, así como también la verdadera identidad del G. A. D. U. (“Gran Arquitecto del Universo”) es ocultado, y solo una cantidad relativamente pequeña que alcanza el grado mas alto son escogidos (el elegido) para conocer la verdad de que su dios es Lucifer –el brillante, el que ilumina- el “dios de este mundo”:

En los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios. 2 Corintios 4:4

La letra “G” que esta tan prominentemente colocada junto con el cuadrado y el compás en el emblema oficial de la Masonería –reclamada varias veces por los escritores masónicos como “el Gran Geométrico” o el “principio Generativo” para otros –actualmente denota Gnosticismo. Y en uno de los métodos de inscripción utilizados por Francis Bacon (“código K”) la misma carta tiene el valor numérico de 33. (La Masonería de Rita Escocia fue establecida por Bacon, y el grado mas alto que se puede alcanzar es el 33).

¿Se da cuenta de lo sutil que es el Gnosticismo?. Esta clase de oscuridad espiritual se disfraza como luz. Leer Isaías 5:20 y también un texto bíblico clave el cual es: 2 Carta a los Corintios 11:14 Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz.

Docetismo
El Docetismo toma este nombre de la raíz griega dokéō (δοκέω), que significa parecer o parecerle a uno. Es una doctrina aparecida a finales del siglo I d. C., que afirmaba que Cristo no había sufrido la crucifixión, ya que su cuerpo sólo era aparente y no real. Es esta idea la que el autor de la I carta de Juan, atribuida al apóstol homónimo, quiere desestimar cuando escribe 1 Juan 1:1. Incluso el filósofo gnóstico Basílides afirmó, para explicar el traslado de la cruz, que fue Simón de Cirene y no Cristo quien la cargó, de manera de argumentar a favor de la presencia aparente y no real física de Jesús, pero éste argumento es erróneo, ya que en el registro bíblico se manifiesta que Simón cargó con la cruz después de que a Jesús le propinaron tanto golpes en la cabeza como azotes en el cuerpo, lo cual deja en evidencia que Jesús no la cargó sencillamente por encontrarse demasiado débil y malherido (Véase Mateo 27:26-32; Lucas 23:25-26), mas no por no hallarse en presencia corporal real. Esta corriente tiene su raíz en la influencia platónica, que afirma que son las ideas las únicas realidades y nuestro mundo es sólo un reflejo, una imagen; además, se nutría de la idea, hasta cierto punto generalizada en aquella época, de que la materia era corrupta, que el cuerpo es la cárcel del espíritu, como decían los griegos. La doctrina docética, enraizada también en el dualismo gnóstico, dividía tajantemente los conceptos de cuerpo y espíritu, atribuyendo todo lo temporal, ilusorio y corrupto al primero y todo lo eterno, real y perfecto al segundo; de ahí que sostuviera que el cuerpo de Cristo fue tan sólo una ilusión y que, de igual modo, su crucifixión existió más que como mera apariencia. El Islam conserva también este punto de vista y sostiene que el cuerpo del profeta Isa (el nombre con que conocen a Jesucristo) sólo fue crucificado como una ilusión.

Textos que se piensa que contienen Docetismo:
Evangelio de Felipe
Segundo Tratado del Gran Set
Apocalipsis Gnóstico de Pedro
Evangelio de Judas
Contra epistulam fundamenti (Contra la Epístola Fundamental) de Agustín de Hipona
Evangelio de Pedro
Actos de Juan
Evangelio de Basílides

Continua en Las Herejías III: Sectas II
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viernes, 15 de mayo de 2009

Las Herejías I: Definición

El Tribunal de la Santa Inquisición por Francisco de Goya

Originalmente, la palabra “herejía” propiamente, significaba “escogencia/elección”, específicamente “a un partido”, o “la desunión” (en su forma abstracta). “Herejía” es la  misma palabra griega. Herejía es una creencia o teoría controvertida o novedosa, especialmente religiosa, que entra en conflicto con el dogma establecido.

Basándose en la etimología griega de la palabra, que proviene de hairesis (αἵρεσις), que significa una elección o un grupo de creyentes, es una escuela del pensamiento o una opinión particular o específica sobre un punto de doctrina determinado. La herejía es considerada una tendencia y opción de negar las verdades fundamentales de la fe en los dogmas, no respetando la tradición, el magisterio, y la sagrada escritura, en la cual se fundamentan dichos dogmas, herejía viene de la palabra griega “haireseis” (“hah'ee-res-is”). Si la opinión divergente no es tolerada por las autoridades religiosas o por la corriente de opinión mayoritaria, puede llegar a producirse una situación de conflicto y ruptura. Se diferencia de la apostasía, que es la renuncia formal o abandono de una religión, y la blasfemia, que es la injuria o irreverencia hacia la religión.

La herejía es vista entonces como una desviación sobre el contenido de la fe, y puede llegarse a un cisma o división en el seno de la comunidad religiosa, o a una condena de carácter disciplinario por la insumisión a la autoridad eclesiástica considerada legítima. La herejía nace de una divergencia entre escuelas sobre el significado de la verdad (formulada por el dogma). Se desarrolla a la vez en el plano intelectual, por la oposición irreducible de las tesis y en el plano comunitario, por la imposibilidad práctica de vivir en hermandad con los pertenecientes a la otra escuela.

¿Qué es Herejía?

La palabra herejía se usa generalmente para designar “un error en materia de fe, sostenido con pertinacia”, y se puede describir como una enseñanza doctrinal que es contraria a la enseñada normativa comúnmente dada por la Iglesia de acuerdo con las Sagradas Escrituras. 

En 2 Pedro 2:1 se le llama herejía destructora a la actividad de los falsos maestros que introducen doctrinas erradas que niegan al Señor.

2 Pedro 2:1 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina. 

No obstante, el significado literal de herejía es elección, selección, o partido, y en este último sentido se usa en Hechos 24:14.  

Hechos 24:14 Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas; 

En Gálatas 5:20, la herejía se enumera entre las "obras de la carne" significando allí los partidismos que causan divisiones en la Iglesia y en Tito 3:10 dice que, de la persona “herética” o sea, del "que cause divisiones” después de dos amonestaciones, hay que apartarse de él. 

Apostasía

La apostasía es el abandono o retiro  de la fe cristiana por  parte de alguien que la profesaba anteriormente. En el Nuevo Testamento el término griego apostasía solo aparece en dos pasajes, Hechos 21:21 y en 2 Tesalonicenses 2:3, donde se enseña que antes de la venida del día del Señor habrá una rebelión contra Dios, un abandono de la fe. 

En el lenguaje bíblico se puede describir la apostasía como un volver atrás y no seguir a Jesús (Juan 6:66), o como  renegar o abandonar  la fe (1 Timoteo 4:1), o ser arrastrado por el error (2 Pedro 3:17) y como  apartarse del Dios vivo (Hebreos 3:12). Las consecuencias de la apostasía son nefastas y se describen en Hebreos 6:4-8 y 10:26-29. 

Para no caer en el peligro de la apostasía la Escritura nos motiva a perseverar hasta el fin (Mateo 24:13; Lucas 8:15), estar firmes y retener la doctrina apostólica (2 Tesalonicences 2:15), retener la confianza en Dios (Hebreos 3:14), y resistir al diablo (1 Pedro 5:9) en la confianza de que Dios fortalece a su pueblo frente a las adversidades que pueden llevarlo a la apostasía (1 Pedro 5:10; 2 Tesalonicences 2:16-17). 

La Blasfemia

El término blasfemia  puede usarse en dos sentidos: El primer sentido implica la expresión o acción injuriosa e irreverente contra Dios, el uso de lenguaje ofensivo contra Dios, cuando en vez de darle honor a Dios, se maldice su nombre y esto se castigaba con la muerte según Levítico 24:10-16 y 1 Reyes 21:10, 13. El mayor pecado que la Biblia registra es la blasfemia contra el Espíritu Santo (Mateo 12:31s; Marcos 3:28s) que cierra el camino de salvación a la persona.  

1 Reyes 21:10 y poned a dos hombres perversos delante de él, que atestigüen contra él y digan: Tú has blasfemado a Dios y al rey. Y entonces sacadlo, y apedreadlo para que muera. 

El segundo sentido en que se usa blasfemia implica hablar mal, injuriar, difamar, maledicencia, como en Efesios 4:31, Marcos 7:22; Colosenses 3:8 y Tito 3:2. No se puede hablar mal de una persona ya que esta ha sido hecha conforme a la imagen y semejanza de Dios. 

La Sana Doctrina

El término sana doctrina se usa en las llamadas cartas pastorales en Timoteo 1:10, 2 Timoteo 4:3 y Tito 2:1, así como expresiones similares, tales como las sanas palabras en 1 Timoteo 6:3; 2 Timoteo 1:13, Tito 2:8 o la sana enseñanza en Tito 1:9, recalcando con esta expresión el hecho que hay un cuerpo de verdades doctrinales que deben ser aceptadas y guardadas por los creyentes.  

La palabra que se usa para sana (hyguiaineinquiere decir literalmente portadora de salud; o sea que la sana doctrina es el antídoto, la medicina que se requiere para poder estar libres de la influencia de las doctrinas erróneas que propagan los falsos maestros.

Doctrina de Demonios


La gente realmente no entiende la intención del desarrollo de las doctrinas de demonios. Pablo escribió bajo la dirección del Espíritu Santo, que escribiera sobre esto de modo que entendiéramos lo que eran las doctrinas de los demonios y cómo se manifestarían en los últimos días. Tenemos que entender ese hecho.

1 Carta a Timoteo 4:1-5
1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;2 por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, 3 prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad. 4 Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias; 5 porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

EEspíritu Santo fue enfático e indicó en palabras a Pablo que surgirían dos doctrinas significativas de los demonios en los últimos días que tenían que resistir y exponerse por los elegidos que saben la verdad. Los demonios no decidieron introducir estas doctrinas por casualidad. No son insignificantes. Golpean en el mismo corazón de la intención de Dios en el plan de salvación, y en la suficiencia del sacrificio de Jesucristo. Estas doctrinas son dos errores específicos, que procuran minar la intención racional de la creación.

¿Qué significa tener una conciencia cauterizada?

La conciencia cauterizada es mencionada en 1 Timoteo 4:2, donde el Apóstol Pablo habla acerca de aquellos cuya conciencia ha sido "cauterizada" o dejada insensible en la misma forma que una piel de animal marcada con un hierro llega a ser insensible a más dolor. Para los seres humanos, tener una conciencia cauterizada es el resultado de pecar continua e impenitentemente. Finalmente, el pecado enturbia el sentido moral del bien o del mal, y el pecador impenitente se hace insensible a las advertencias de la conciencia, que Dios ha puesto en cada uno de nosotros para que nos guíen (Romanos 2:15).

En el momento de la salvación, somos limpiados del pecado heredado de Adán y todos los pecados personales. Pero al seguir en nuestro camino como cristianos, seguimos siendo proclives al pecado. Cuando pecamos, Dios nos ha dotado de un método de "limpieza" para restaurarnos al punto de la salvación. "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad." (1 Juan 1:9). Cuando nos dejamos practicar pecados de actitud mental, estamos apagando al Espíritu Santo. Se nos manda a no apagar al Espíritu Santo, Quien nos habita (1 Tesalonicenses 5:19). Cuando seguimos en nuestros pecados de actitud mental sin confesarlos, y comenzamos a practicar estos pecados en nuestros cuerpos (Santiago 1:15), entristecemos al Espíritu Santo, algo que no debemos hacer (Efesios 4:30). Una vez más, tenemos la opción de confesar y arrepentirnos, o continuar en el pecado y retroceder espiritualmente. Cuando seguimos con el pecado, nuestras almas empiezan a ser moralmente insensibles. Por fin llegamos a un punto donde nuestra conciencia está cauterizada y no es capaz de ayudarnos a discernir entre el bien y el mal. Es como si un hierro caliente se aplicó a nuestra conciencia, y lo destruyó. Y lo que es peor, podemos llegar al lugar donde no nos importa cuán pecaminosos somos. Esto es lo que se quiere decir en 1 Timoteo 4:2, donde Pablo se refiere a los falsos maestros, llamándolos "embusteros hipócritas, que tienen la conciencia encallecida." (NVI) Se puede ver esto fácilmente con el mal puro. Un asesino en serie, por ejemplo, ha tenido su conciencia cauterizada, y ya no funciona ni le guía en lo que es correcto e incorrecto.

Los cristianos que siguen pecando a pesar de la disciplina divina pueden de hecho pecar ellos mismos de esta vida y a la presencia de Dios. Dios puede llevar un creyente pecaminoso al cielo a fin de impedirlo hacer más daño a sí mismo y a su testimonio para el santo nombre del Señor.

16 Si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida. 17 Toda injusticia es pecado; pero hay pecado no de muerte. (1 Juan 5:16-17).

Estos pecados no nos hacen perder nuestra salvación, pero sin duda alguna afectan nuestra relación con Dios y con los demás. Somos sabios si nunca nos deterioramos hasta el punto de tener la conciencia cauterizada.

Historia

A partir del edicto de Constantino I el Grande en el año 313 y más particularmente a partir del concilio de Nicomedia en el año 317, erigido en tribunal destinado a imponer a Arrio una primera confesión de fe bajo pena de excomunión, el dogma se define como norma de la «fe verdadera» como reacción a las desviaciones heréticas. Más tarde, en el concilio de Nicea I, en el año 325 d.C. se define como herética una doctrina divergente de la enseñanza oficial de la Iglesia y de sus dogmas consagrados por su autoridad (obispo, concilio) en la base a las Escrituras y la Tradición.

Posteriormente, autores como Agustín de Hipona destacaron por su vehemencia en combatir las herejías cristianas y otras ideas como el maniqueísmo. La herejía (casi sinónimo de heterodoxia) puede ser una ocasión de crear una nueva forma de ortodoxia. En el contexto del desarrollo de las heterodoxias de los siglos II y III, una heterodoxia se convierte en herejía a partir del momento de su condena por medio de un concilio.

La palabra ocurre en el Nuevo Testamento, unas 9 veces y es traducida como “secta” en los siguientes pasajes:

Hechos 5:17: “Entonces levantándose el sumo sacerdote y todos los que estaban con él, esto es, la secta de los saduceos, se llenaron de celos;”

Hechos 15:5: “Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían creído, se levantaron diciendo: Es necesario circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés.”

Hechos 24:5: “Porque hemos hallado que este hombre es una plaga, y promotor de sediciones entre todos los judíos por todo el mundo, y cabecilla de la secta de los nazarenos.”

Hechos 26:5: “los cuales también saben que yo desde el principio, si quieren testificarlo, conforme a la más rigurosa secta de nuestra religión, viví fariseo.”

Hechos 28:22: “Pero querríamos oír de ti lo que piensas; porque de esta secta nos es notorio que en todas partes se habla contra ella.”


También es traducida como “herejía” en los siguientes versículos:

Hechos 24:14: “Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley y en los profetas están escritas;”

Gálatas 5:20: “idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,”

2 Pedro 2:1: “Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.”

Como a cristianos se nos advierte contra las “herejías” en muchos versículos:

1 Corintios 11:19: “Porque es preciso que entre vosotros haya disensiones (“haireseis”), para que se hagan manifiestos entre vosotros los que son aprobados.”

Hechos 20:29-30: “Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. 30 Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos.”

Filipenses 3:2: “Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo.”


Las herejías incluyen la negación del monoteísmo (Mormonismo, Testigos de Jehová), de la Trinidad (Mormones, Testigos de Jehová, Islam), la deidad de Cristo (Testigos de Jehová, Islam), y la persona del Espíritu Santo (Testigos de Jehová, Cristadelfianos, El Camino Internacional). Otras herejías son las enseñanzas de que los hombres se convierten en dioses (Mormonismo), de que existen muchos dioses (Mormonismo), de que Jesús perdió Su divinidad en el infierno y terminó la expiación allí, de que las buenas obras son necesarias para la salvación /Nota: Todos los cultos seudo cristianos dicen esto), etc.

“De hecho, el error nunca es establecido en su deformidad desnuda, no sea que siendo expuesto, pueda ser detectado de una vez. Sino que es vestido hábilmente como atractivo en su forma externa, para hacerlo parecer al inexperto (tan ridículo como la expresión pareciera) más verdadero que la verdad misma.” (Ireneo, Contra las Herejías 1.2).

La Biblia  condena tanto las doctrinas falsas como los falsos maestros.

Gálatas 1:8-9
8 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. 9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.

(Ver también: 1 Corintios 16:22; 2 Corintios 11:13-15; 1 Timoteo 1:18-20; Tito 3:10).

Los cristianos son salvos por la fe en la obra de Jesús en la cruz; pero la sola fe por sí misma no es suficiente. Permítannos explicarlo: La fe no es una sustancia que Ud. obtiene. La fe es creer, y la fe es tan buena solo en quien Ud. la coloca. Los falsos dioses no salvan a nadie. Esta es la razón por la cual el Dios verdadero dice en Éxodo 20:3: “No tendrás dioses ajenos delante de mí.”

La fe en sí no es lo que salva. Note, que la humanidad tiene fe en lo que hace, en todo lo que logra; pero esa fe no la salvará; solo la fe en el Dios verdadero es lo que salva.

Herejía y heterodoxia

La palabra heterodoxia, de origen griego, es la cualidad del heterodoxo, el cual está disconforme con el dogma de una religión.

Contra las herejías
Contra las Herejías (Adversus haereses, Κατὰ αἱρέσεων) es una obra de cinco volúmenes escrita por Ireneo de Lyon en el siglo segundo. La obra fue considerada escrita alrededor del año 180, por mencionarse a Eleuterio como actual obispo de Roma.

En ella, Ireneo identifica y describe las muchas escuelas gnósticas de su tiempo. Solo existen fragmentos del texto original en griego, pero hay muchas copias enteras en latín que se hicieron poco después de su publicación en griego, y los libros IV y V están también presentes en la traducción literal al armenio.

Estructura
Contra las Herejías está compuesto por cinco libros. Cada libro es una obra individual, cada libro se enfoca en un tema de argumento. El libro I habla sobre las herejías gnósticas de Valentín el gnóstico y sus predecesores que van desde Simón el Mago hasta los ofitas y cainitas.

El libro II provee pruebas racionales que comprueban que el valentinismo no tiene méritos en términos de doctrinas.

El libro III demuestra que estas doctrinas son falsas siendo esto comprobado por los Evangelios. El Libro IV presenta a Jesús resaltando la unidad de Antiguo Testamento y el Evangelio. El libro V, el final, se enfoca en múltiples dichos de Jesús y en las cartas de Pablo de Tarso.

Propósito
El propósito de Contra las Herejías fue refutar las enseñanzas de varios grupos gnósticos; aparentemente, muchos mercaderes griegos empezaron oratorias y campañas para hacer prosperar el gnosticismo en el arzobispado de Ireneo. Otra teoría popular sugiere que un grupo de gnósticos conocidos como los valentinianos tomaron parte de las celebraciones en la Iglesia primitiva a pesar de sus radicales diferencias con ésta.

También se dice que los gnósticos se reunían secretamente afuera de las iglesias regularmente y allí discutían sobre su sabiduría secreta y sobre la escritura que decían que les pertenecía. Como obispo, Ireneo sintió la obligación de mantenerse alerta de los valentinianos para proteger a la Iglesia de ellos. Para esto, Ireneo se educó y se informó sobre las doctrinas y tradiciones gnósticas. Con el tiempo esto lo dirigió a compilar su obra.

Sin embargo, al parecer la principal razón de Ireneo de escribir esta obra fue haber percibido que los cristianos en la provincia de Asia menor y Frigia necesitaban especialmente su protección de los gnósticos, debido a que ellos no tenían tantos obispos que supervisaran y ayudar a mantener esta clase de problemas bajo control. Ireneo también debió de haber pensado que los del este eran ignorantes y no muy bien informados sobre estos asuntos que sucedían en el oeste. Debido a que Ireneo permanecía en la provincia de Galia del Imperio romano del oeste y en cambio la comunidad cristiana de Asia permanecía lejos. Ireneo se dio cuenta de escribir este tratado sería la mejor manera de informar y ofrecerles una guía.

Contra las herejías fue la principal descripción del gnosticismo hasta el descubrimiento de los Manuscritos de Nag Hammadi en 1945.

Continua en Las Herejías II: Sectas I
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